
Durante el embarazo ocurren gran cantidad de cambios en el
cuerpo de la madre, tanto a nivel físico como hormonal, por lo que puede
sufrir algunos síntomas que empiezan desde la primera semana de
embarazo.
¿El flujo vaginal es un síntoma del embarazo?
Muchas madres tienden a creer que las náuseas matutinas y
la falta del ciclo menstrual son los únicos signos de embarazo. Lo que
muchas mujeres desconocen es que el cambio del flujo vaginal también es
un síntoma del embarazo y suele variar durante las diversas etapas del
mismo.
El cambio en los niveles hormonales del cuerpo de la madre
provoca que haya un mayor flujo sanguíneo en todo el cuerpo, incluyendo
la vagina, por lo que puede observar que el flujo tiende a ser de color
blanco.
¿Qué ocurre si no cambia el flujo vaginal?
Los cambios en el flujo vaginal no ocurren en todas las
mujeres durante el primer trimestre de embarazo, por lo que no presentar
dichos cambios no es un indicador de no estar embarazada. En caso de
que presente dudas, paute una consulta médica para comprobar el
embarazo.
Debe recordar que las citas prenatales son de suma
importancia para verificar el desarrollo del bebé y anticipar cualquier
complicación que pueda presentarse.
¿Qué es el tapón mucoso?
Se le llama al tapón mucoso al flujo vaginal que se produce
durante el embarazo debido a que bloquea la abertura del útero para
evitar que el bebé contraiga una infección. Dicho tapón mucoso será
expulsado al momento del parto.
¿Qué ocurre si el flujo tiene olor?
Las mujeres embarazadas son propensas a contraer
infecciones vaginales por hongos, las cuales deben ser tratadas para no
afectar al bebé. Si nota que el flujo tiene un olor desagradable y se
torna gris, amarillo o verde, lo más probable es que esté presentando
una infección vaginal denominada candidiasis.
¿Qué es la candidiasis?
La candidiasis es una infección causada por un hongo de la familia Candida y suele producirse en la vagina.
¿Las infecciones vaginales afectan al bebé?
Por lo general no afectan al bebé pero de no ser tratadas,
las infecciones vaginales pueden afectar a su bebé al momento del parto,
por lo que debe estar muy atenta a signos como cambio de coloración,
picazón o irritación y, en caso de presentar estos síntomas, consultar
con su médico.
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